PSICOLOGÍA INFANTIL
LOS HIJOS NO SON NUESTROS, TAN SOLO NOS LOS PRESTAN
Son múltiples las teorías acerca de la formación de la personalidad y la edad límite para la estructuración de cada uno de sus rasgos en niños; sin embargo, no es menos cierto, que un niño con buena autoestima es capaz de establecer un adecuado vínculo con las personas que le rodean, se comunica bien, se siente competente, valioso, se siente aceptado tal y como es, asume sus errores los cuales más adelante se siente capaz de corregir y transformarlos en virtudes.
Si el niño presenta baja autoestima no será capaz de confiar en sí mismo y por tanto en los demás, en algunas ocasiones pueden llegar a ser agresivos o desafiantes generando rechazo en las personas que se encuentran a su alrededor, lo que hace que recaiga en su auto-valoración, son tímidos y tienen mucha dificultad para interactuar en la sociedad, a la hora de jugar no poseen la habilidad para compartir esta actividad, suelen repetir frases como: "nadie me quiere", "todo me sale mal", "siempre en todo me va mal", "todo es mi culpa", creen que todo lo que ocurre es algo personal, que es en contra de ellos, algo que solo les sucede a ellos y que todo lo malo que puede llegar a suceder será su culpa.